Deberá incluir los bienes muebles (por ejemplo vehículos) e inmuebles (por ejemplo propiedades), semovientes, menaje de casa, participación en sociedades, bonos, certificados de depósito a plazo, fondos complementarios de pensión, ahorros, cuentas bancarias, tarjetas de crédito, pasivos (por ejemplo préstamos, compras a crédito), fianzas, salarios y demás ingresos como alquileres, dietas, dividendos, honorarios, comisiones, pensiones, así como todos los derechos y las obligaciones que constituyen su patrimonio, tanto dentro del terriotorio nacional como en el extranjero.