La licitación abreviada es también un procedimiento ordinario de concurso pero menos formalista y se basa en hacer uso de un registro de proveedores a efectos de invitar únicamente a las empresas inscritas en éste, siguiendo una serie de reglas establecidas respecto a la forma de realizar la invitación. Se trata entonces de un concurso más sencillo, con menor concurrencia de oferentes.