Se refiere a los contratos celebrados entre entes públicos, estableciéndose los siguientes requisitos:
1. Ambos sujetos de la contratación deben contratar de acuerdo con sus respectivas competencias, así no podría aparecer una entidad obligándose a prestaciones que escapan de su ámbito competencial.
2. Debe existir un equilibrio, no es posible que una sola parte cargue con la totalidad o la mayoría de los recursos que sean requeridos para cumplir el objeto del contrato.
3.Finalmente, si cada entidad se obliga a dar prestaciones que impliquen erogación de recursos, estos deben estar debidamente presupuestados y disponibles, para hacer frente a la obligación que se asume en el contrato.