Sí, ello debido a la naturaleza propia de este tipo de mecanismos de resolución alternativa de conflictos, en donde para la selección del árbitro o conciliador se requiere no solo la experiencia o los conocimientos técnicos o profesionales, sino también involucra un elemento de confianza para cada una de las partes; lo cual luce incompatible con los procedimientos ordinarios de contratación de servicios.